Recortar la protección de los trabajadores no redunda en mayor crecimiento
¿Produjo los resultados esperados?
El reciente informe de referencia de la OIT Perspectivas sociales y del empleo en el mundo 2015: El empleo en plena mutación , que analiza datos de 63 países, incluyendo las economías más avanzadas, así como diversos países de África, de Asia y de América Latina, a lo largo de los últimos 20 años, constata que la disminución de la protección de los trabajadores no estimula el crecimiento del empleo.“La regulación del trabajo puede ofrecer protección a los trabajadores sin perjudicar la creación de empleo."Steven Tobin, uno de los autores del informe
“El informe muestra claramente que, si está bien elaborada, la regulación del trabajo puede ofrecer protección a los trabajadores sin perjudicar la creación de empleo”, afirmó Steven Jobin, uno de los autores del informe. “De hecho, un número de países emergentes y en desarrollo incrementó la protección de los trabajadores sin afectar la creación de empleo”, agregó.
La concepción de las políticas es crucial
Según el informe, la cuestión es cómo concebir una regulación en función de la situación económica y del mercado laboral de un país en particular. Las regulaciones demasiado liberales pueden ser tan contraproducentes para el crecimiento económico, la creación de empleo, la igualdad y la cohesión social como las demasiado rígidas. De la misma manera, un sistema judicial eficaz es fundamental para garantizar que la legislación del trabajo sea efectivamente aplicada.Además, las políticas adoptadas en materia de legislación laboral equilibradas tienen mayores probabilidades de producir resultados cuando el diálogo social entre los poderes públicos, los empleadores y los trabajadores permite encontrar el camino a seguir.
“Nuestro informe llega a la conclusión que reducir la protección de los trabajadores no disminuye el desempleo. En efecto, muestra que los cambios mal concebidos que debilitan la legislación en materia de protección del empleo tienden a ser contraproducentes, tanto a corto como a largo plazo. Encontrar el equilibrio perfecto depende de las características estructurales específicas de cada país así como del estado del ciclo económico, motivo por el cual es indispensable que las organizaciones de empleadores y de trabajadores participen en el proceso de reforma”, concluyó Steven Tobin.